Pintar las paredes para soportar la prisión del Estado Islámico
scucharlo a algunos de ellos susurrando a Dios en kurdo mientras se arrodillaban en oración. En algún momento, Abu Diyar comenzó a bosquejar en las paredes.
scucharlo a algunos de ellos susurrando a Dios en kurdo mientras se arrodillaban en oración. En algún momento, Abu Diyar comenzó a bosquejar en las paredes.
Ni siquiera el más tímido de los observadores podría afirmar que la Conferencia de Bagdad cumplió alguno de sus objetivos. No hubo evidencia de ningún cambio o mejora en las relaciones internacionales, como tampoco hubo cambios en las posiciones mantenidas por las potencias regionales.
(Parlamento) y el primer funcionario electo de mi familia. En este contexto, algunas cosas me ayudaron a sobrevivir, la más importante de las cuales fue mi experiencia como periodista.
recolectar la deliciosa fruta de verano durante su temporada de cosecha (relativamente) corta. Pero este año, como resultado del clima errático y los patrones meteorológicos durante marzo y abril, la cosecha de mango se vio afectada y los agricultores presenciaron una caída abrupta en el rendimiento.
nestar de los ciudadanos, les brinda atención médica, que es uno de los derechos humanos básicos garantizados por la Constitución y los pactos internacionales.
Los acontecimientos en la región autónoma kurda en la parte norte de Siria, devastada por la guerra a mediados de 2012, sacaron a la superficie la problemática de los kurdos, el dilema más espinoso de Turquía, y llevaron al inicio del proceso de paz kurdo en 2013.
Para comprender los resultados de las elecciones anticipadas en Irak, debemos analizar los candidatos y el electorado. Si bien estos comicios fueron una respuesta a las demandas del movimiento de protesta de octubre de 2019, es probable que sean boicoteadas por los mismos activistas que las exigieron por un ambiente preelectoral inhóspito.
Mientras Irak se prepara para celebrar sus sextas elecciones parlamentarias desde 2005 y al amparo de la intervención estadounidense que expulsó a Saddam Hussein e instaló un nuevo sistema político llamado ‘democrático’, se conjuran diferentes escenarios sobre el Bagdad de hoy y el de antaño.
23 de agosto de 1921 fue la fecha de la coronación del rey Faisal I en la plaza Qushla de Bagdad, que marcó el nacimiento del Estado iraquí moderno. Este agosto, Irak cumplirá 100 años.
Si tuviera que inspirarme en el estilo de escritura de las últimas 300 páginas que leí, diría que mis sentimientos hacia este libro son tan extremos como el clima de Bagdad. Por otro lado, historias de héroes como Harith Al Sudani deben ser contadas, particularmente en un tiempo donde los iraquíes parecen estar siendo apartados de la historia de la lucha contra el Daesh. The Spymaster of Baghdad [El jefe de espías de Bagdad] hace un buen trabajo en llevar al lector a través de la historia de la célula de inteligencia de los Halcones Iraquíes (N. de T.: una unidad antiterrorista dependiente del Estado de Irak), cómo y por qué fue concebida y los triunfos obtenidos que, por la naturaleza del trabajo, no son necesariamente de público conocimiento. El libro se centra en cuatro personajes principales: Abu Ali Al Basri, el jefe de los Halcones, Harith y Munaf Al Sudani, dos hermanos de la ciudad de Sadr cuyas hazañas contra Daesh forman la mayor parte de la historia y Abrar Al Kubaisi, una joven mujer bagdadí que se radicaliza y une al Daesh con la ambición de mejorar sus capacidades con las armas químicas. The Spymaster of Baghdad logra contar estas historias, es un libro cautivante que consagra la inimaginable valentía de Harith, el espía iraquí que salvó cientos de vidas.