Visiones económicas rivales del Golfo
Las visiones económicas ofrecen a los gobiernos regionales hojas de ruta para el desarrollo, pero también pueden servir como una herramienta para la medición y, en última instancia, la rendición de cuentas.
Las visiones económicas ofrecen a los gobiernos regionales hojas de ruta para el desarrollo, pero también pueden servir como una herramienta para la medición y, en última instancia, la rendición de cuentas.
Las sinergias entre el Golfo y los escenarios del Mediterráneo oriental crecieron sustancialmente en los últimos años.
Junio fue un mes ajetreado para los intercambios económicos entre Singapur y Emiratos Árabes Unidos (EAU). El Grupo IB (Group-IB en inglés) —una empresa de ciberseguridad con sede en Singapur que trabaja con Interpol y Europol— abrió su Centro de Investigación e Inteligencia en Medio Oriente y África en Dubái.
La reciente presión de varios Estados árabes para normalizar las relaciones con el régimen de Asad se basa en la falsa premisa de que la guerra terminó y es necesario restablecer los lazos para presionar a Damasco para que cambie su relación con Irán. Otras dinámicas regionales también son un factor que explica este cambio: Emiratos Árabes Unidos, por ejemplo, lo ve como un equilibrio necesario contra lo que percibe como acciones adversarias de Turquía con el grupo yihadista sirio Hayat Tahrir al Sham (HTS) en Idlib. Sin embargo, estas razones para rehabilitar el régimen de Asad son totalmente falaces. Los inconvenientes y las consecuencias políticas no sólo afectarán a los Estados árabes, sino que también dañarán los intereses estadounidenses, lo que dificultará que Estados Unidos gire completamente para abordar la creciente amenaza de China.
No es inaudito en Kerala toparse con una mezquita construida durante la noche por los genios. Los caminantes que duermen en las mezquitas a menudo relatan haber oído a los genios invisibles haciendo sus abluciones por el estanque de la mezquita.
El acuerdo de cooperación estratégica integral de 25 años entre China e Irán, que se firmó en Teherán el sábado, es un gran avance para los dos países y tendrá efectos a largo plazo en el equilibrio geopolítico del Golfo y la región en su conjunto. Después de cinco años de negociaciones, la firma del acuerdo, que cubre temas económicos, políticos y de seguridad, llega en un momento en que las relaciones entre Pekín y Washington están en su peor momento.
En 2013, Ibrahim Kalin, quien era el asesor principal en política exterior del entonces Primer Ministro Recep Tayyip Erdogan y es el actual portavoz presidencial, introdujo el término “preciada soledad” en la literatura sobre relaciones internacionales en un intento por justificar el estado de la política de Turquía en Medio Oriente, política que fue muy criticada en aquellos días.