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El Interprete Digital

La Nakba y los refugiados palestinos | Preguntas y respuestas de IMEU

Por los Editores para The Institute for Middle East Understanding (IMEU)

Manifestación en Berlín por el Día de la Nakba palestina. [Libertinus/Creative Commons]

¿Qué es la Nakba?

Nakba es una palabra de origen árabe que significa ‘catástrofe’ y se refiere a la limpieza étnica de Palestina por parte de Israel, su exilio de palestinos y la conversión de estos en refugiados, su desposesión de propiedades palestinas, su destrucción de ciudades, pueblos y aldeas palestinos y su intento de borrar la existencia del pueblo palestino de su patria en 1948.

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Antes, durante y después de la creación de Israel en mayo de 1948, primero las milicias sionistas y después el ejército israelí utilizaron el terrorismo y cometieron masacres y otras atrocidades para expulsar a los palestinos de sus hogares. Las milicias sionistas y el ejército israelí también saquearon y demolieron sistemáticamente propiedades palestinas. Cuando Israel firmó los acuerdos de armisticio con los Estados árabes vecinos en 1949, se calculaba que había 750.000 refugiados palestinos (aproximadamente el 75% de la población palestina que vivía en las tierras que se convirtieron en Israel). Israel demolió entre 400 y 500 aldeas, pueblos y ciudades palestinas.

La Nakba no es sólo un acontecimiento histórico; la actual desposesión de palestinos por parte de Israel y la colonización de tierras palestinas significan que la Nakba continúa y define con precisión la vida palestina bajo la ocupación militar, el apartheid y el colonialismo de colonos israelíes.

¿Cómo era la vida en Palestina antes de la Nakba?

Los palestinos disfrutaban de una sociedad próspera y multirreligiosa en Palestina mucho antes de que comenzara el sionismo en la década de 1880. Antes de la Primera Guerra Mundial, musulmanes, cristianos y judíos palestinos vivían juntos en Palestina con los mismos derechos de ciudadanía y autonomía religiosa bajo el Imperio Otomano. Los palestinos se presentaban a las elecciones al Parlamento otomano y representaban allí a sus circunscripciones palestinas. La economía palestina autóctona era autosuficiente y también estaba integrada en las redes comerciales económicas regionales y mundiales. Antes y después de la Primera Guerra Mundial, la identidad palestina constituyó la base de un nacionalismo palestino moderno, expresado a través de periódicos, revistas, organizaciones de la sociedad civil y partidos políticos.

Tras la Primera Guerra Mundial, la Sociedad de Naciones otorgó a Gran Bretaña un ‘mandato’ sobre Palestina. Se suponía que los mandatos preveían la autodeterminación y la independencia de las poblaciones indígenas. Sin embargo, el Mandato de Palestina se diferenciaba de todos los demás mandatos en que comprometía a Gran Bretaña a promover el establecimiento de un Hogar Nacional Judío vagamente definido en Palestina. A lo largo del mandato (1922-1948), Gran Bretaña privilegió el establecimiento de instituciones políticas sionistas en detrimento de la población autóctona palestina mayoritaria.

¿Por qué los palestinos no aceptaron el Plan de Partición de la ONU?  

En la época del Plan de Partición de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que fue recomendado por la Asamblea General en noviembre de 1947, el movimiento sionista poseía sólo el 7% de la tierra de Palestina y los judíos constituían sólo un tercio de la población total. A pesar de ello, el plan de partición preveía la creación de un Estado judío en más del 55% de Palestina. Incluso dentro de las fronteras propuestas para el Estado judío, sólo habría habido una pequeña mayoría de residentes judíos (de 498.000 a 497.000 palestinos). 

Los organismos políticos palestinos, encabezados por el Comité Superior Árabe (CSA), rechazaron el plan de partición por considerarlo una violación del principio de autodeterminación y de los derechos de la mayoría. En su lugar, el CSA propuso que Palestina siguiera siendo un Estado unitario y democrático con fuertes derechos para las minorías, incluida la representación proporcional de los ciudadanos judíos de Palestina en la asamblea legislativa y la autonomía comunal judía en algunas esferas. 

A pesar de que Estados Unidos votó a favor del plan de partición, la administración del entonces Presidente Truman se dio cuenta rápidamente de que el plan de partición no podía aplicarse y, en su lugar, apoyó una propuesta para colocar a Palestina bajo administración fiduciaria de la ONU hasta que se encontrara una solución política. La administración Truman volvió a dar marcha atrás al reconocer a Israel.

¿Estaba planeada la limpieza étnica de Palestina por parte de Israel?       

Sí. En marzo de 1948, los líderes sionistas encabezados por David Ben Gurion, que se convertiría en el primer Primer Ministro de Israel, aprobaron el Plan Dalet (D), que preveía la “Destrucción de pueblos (incendiando, volando y sembrando minas en los escombros) […] En caso de resistencia, la fuerza armada debe ser aniquilada y la población debe ser expulsada fuera de las fronteras del Estado”.

La aplicación de este plan comenzó antes del establecimiento de Israel en mayo de 1948. Para entonces, ya había entre 250.000 y 300.000 refugiados palestinos que fueron expulsados o huyeron de sus hogares, a menudo tras los ataques de las milicias sionistas contra las principales ciudades palestinas -Jerusalén, Haifa, Jaffa, Tiberíades- y pueblos, las campañas de bombardeos contra civiles y las masacres en pueblos como Deir Yassin.

Esta campaña de limpieza étnica se aceleró e intensificó tras la creación de Israel, convirtiendo en refugiados a unos 750.000 palestinos cuando se firmaron los acuerdos de armisticio con los Estados árabes vecinos en 1949. Incluso después de los acuerdos de armisticio, Israel siguió limpiando étnicamente a los palestinos de sus hogares. Por ejemplo, Israel siguió deportando a palestinos de sus hogares en al Majdal (conocida hoy como la ciudad de Ashkelon) a la Franja de Gaza hasta octubre de 1950.

¿Quiénes son en la actualidad los refugiados palestinos?

De una población original estimada en 750.000 personas en 1948, hoy existen más de 7 millones de refugiados palestinos en todo el mundo, 5,7 millones de los cuales son refugiados registrados en el Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA por sus siglas en inglés), una agencia especializada de la ONU creada en 1949 para proporcionar servicios sociales a los refugiados.

UbicaciónRefugiados registradosCampos de refugiados
Franja de Gaza1.1480.0008
Cisjordania872.00019
Siria569.00012
El Líbano480.00012
Jordania2.307.00010

EPÍGRAFE: Refugiados palestinos registrados en la UNRWA. [https://www.unrwa.org/where-we-work]

Además, se calcula que existen más de 400.000 ciudadanos palestinos de Israel clasificados como desplazados internos. Estos palestinos también fueron expulsados de sus hogares y desposeídos de sus propiedades. Aunque permanecieron dentro de las fronteras de lo que se convirtió en Israel y recibieron la ciudadanía del Estado, Israel nunca les permitió regresar a sus tierras y propiedades.

¿Cuáles son los derechos de los refugiados palestinos? 

El artículo 13 de la Declaración Universal de Derechos Humanos establece: “toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país”.

Además, la Resolución 194 de la Asamblea General de la ONU, adoptada en diciembre de 1948, resolvió que “debe permitirse a los refugiados palestinos que deseen regresar a sus hogares y vivir en paz con sus vecinos que lo hagan lo antes posible, y que debe pagarse una indemnización por los bienes de quienes decidan no regresar y por las pérdidas o daños sufridos por los bienes que, en virtud de los principios del derecho internacional o de la equidad, deban ser reparados por los gobiernos o autoridades responsables”.

Además de que el derecho internacional reconoce el derecho de retorno de los refugiados, también se confiere automáticamente el estatuto de refugiado a los descendientes de refugiados. Según la ONU, “los refugiados palestinos no son distintos de otras situaciones de refugio prolongado, como las de Afganistán o Somalia, donde existen múltiples generaciones de refugiados, considerados por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados como refugiados y apoyados como tales. Las situaciones de refugio prolongado son el resultado de la incapacidad de encontrar soluciones políticas a sus crisis políticas subyacentes”.

La crisis de los refugiados palestinos persiste desde hace casi 75 años porque Israel se niega a permitir que los refugiados palestinos regresen a sus hogares y propiedades, violando el derecho internacional.

¿Cuál es la política de Estados Unidos sobre la Nakba y la crisis de los refugiados palestinos?

Estados Unidos votó tanto a favor de la Resolución 194 de la Asamblea General de la ONU en 1948, reafirmando el derecho de retorno de los refugiados palestinos, como a favor del establecimiento de la UNRWA en 1949. A excepción de unos pocos años durante la administración del Presidente Trump, Estados Unidos apoyó sistemáticamente a la UNRWA, contribuyendo con más de 6.000 millones de dólares a su presupuesto desde 1950.

Estados Unidos, a través de su presidencia de la Comisión de Conciliación Palestina, presionó originalmente a Israel para que aceptara la repatriación de un número significativo de refugiados palestinos. Sin embargo, este compromiso resultó ser de corta duración, ya que Estados Unidos comenzó a favorecer los planes para reasentar a los refugiados palestinos en otros países ya en 1949.

Estados Unidos apenas volvió a ocuparse del destino de los refugiados palestinos hasta que comenzaron las negociaciones sobre el estatuto permanente entre palestinos e israelíes en Camp David en el 2000. Poco antes de finalizar su mandato, el Presidente Clinton publicó unos ‘parámetros’ para la paz palestino-israelí que socavaban los derechos de los refugiados palestinos. Sus parámetros afirmaban que “no se debe esperar que Israel reconozca un derecho ilimitado de retorno al Israel actual”, y que la repatriación de los refugiados palestinos a Israel estaría sujeta a sus “decisiones soberanas”. 

En la ronda más reciente de negociaciones palestino-israelíes en 2013-2014, el entonces Secretario de Estado John Kerry supuestamente presentó una cifra de solo 80.000 refugiados palestinos a los que se permitiría regresar a sus hogares, menos del 2% de los refugiados registrados en ese momento.

¿Cómo socava el Congreso los derechos de los refugiados palestinos?

El Congreso también tomó medidas para socavar los derechos de los refugiados palestinos. El Informe del Senado 112-172 al proyecto de ley de Asignaciones del Departamento de Estado, Operaciones Extranjeras y Programas Relacionados de 2013 ordenó al Departamento de Estado emitir un informe al Congreso detallando “el número aproximado de personas que, en el último año, recibieron servicios de la UNRWA: (1) cuyo lugar de residencia era Palestina entre junio de 1946 y mayo de 1948 y que fueron desplazados como resultado del conflicto árabe-israelí de 1948; y (2) que son descendientes de las personas descritas en el subpárrafo (1)”. Este requisito de información intenta diferenciar entre el estatuto de refugiado de los refugiados originales y sus descendientes, lo que es contrario al derecho internacional.

La intención de los miembros del Congreso de utilizar este informe para tratar de extinguir los derechos de los refugiados palestinos es evidente en una carta ‘Dear Colleague’ de 2020 (N.d.T: carta de un legislador a sus colegas), encabezada por el congresista Doug Lamborn, presionando para la desclasificación de este informe. La carta intenta borrar a los refugiados palestinos afirmando que sus derechos son una “ficción”.

En lugar de aprobar legislación para intentar negar los derechos de los refugiados palestinos, el Congreso y la administración del Presidente Biden deben centrarse en los derechos de los refugiados palestinos a regresar a sus hogares como parte de cualquier esfuerzo basado en principios para establecer una paz justa. Cualquier intento de Estados Unidos de negociar una paz palestino-israelí que no se base en los principios del derecho internacional y la justicia está abocado al fracaso.

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N.d.T.: El artículo original fue publicado por The Institute for Middle East Understanding (IMEU) el 5 de mayo de 2022.